¿Le han diagnosticado cáncer de mama o acaba de someterse a una mastectomía? Si es así, ahora puede estar lista para enterarse de sus opciones de tratamiento en lo relacionado con la reconstrucción mamaria. Sabemos que se trata de una decisión muy personal, y nuestro equipo de cirujanos mamarios está aquí para responder cualquier pregunta o inquietud que pueda tener sobre la reconstrucción.
Si bien hay varias opciones, la reconstrucción mamaria prepectoral está ganando popularidad porque el implante se coloca sobre el músculo pectoral, en lugar de por debajo de este músculo, a diferencia de muchos métodos tradicionales de reconstrucción basados en implantes.
¿Por qué es beneficioso?
Algunas mujeres informan tensión, jalones o molestias en el área del pecho cuando los implantes se colocan debajo del músculo pectoral. Con el tiempo, los músculos pueden sufrir cambios que pueden hacer que los senos se separen y parezcan más amplios. Para evitar que ocurran estos problemas en primer lugar, nuestro equipo de cirujanos plásticos ofrece la reconstrucción mamaria prepectoral.
Lo natural es que el músculo pectoral esté plano contra la pared del tórax. Colocar un implante debajo de este músculo puede hacer que el músculo altere su forma y cause molestias crónicas, pero colocar el implante por encima del músculo, donde lo natural es que haya tejido mamario, hace que el implante se sienta más natural y más cómodo.
Las candidatas ideales para la reconstrucción mamaria prepectoral son las mujeres con buen estado físico y que tienen senos pequeños o medianos. A las buenas candidatas para este tipo de cirugía reconstructiva tampoco se les habrá extirpado cáncer mamario en la región del pezón. Es también una gran opción para mujeres que no pueden someterse a una reconstrucción con su propio tejido mamario.
Algunos de los beneficios de la reconstrucción mamaria prepectoral son recuperación más sencilla y que menos molestias que con el procedimiento tradicional. Además, se hacen pequeñas incisiones en la parte inferior de las mamas, por lo que no notará las cicatrices (también se desvanecerán con los años). La probabilidad de que los implantes prepectorales roten, se muevan o se rompan es muy pequeña, en comparación con otros tipos de prótesis. La mayoría de los implantes de gel duran un promedio de 10 a 15 años antes de que necesiten un reemplazo.
Si desea obtener más información sobre reconstrucción mamaria prepectoral y si este procedimiento es correcto para usted, llame hoy mismo a Cirugía Plástica Constructiva en Trumbull, Connecticut y Garden City, Nueva York.
La colocación de implantes en la posición prepectoral es un procedimiento de conservación muscular nuevo, que evita el dolor, la tensión y las deformidades por movimiento a largo plazo. Lo tradicional era que el músculo pectoral de la paciente, así como la fascia muscular de los músculos recto y serrato, se levantaran de la pared torácica y se usaran para cubrir un expansor de tejido. La cobertura lograda por este procedimiento es muy ajustada y lleva a un proceso de expansión doloroso y prolongado. El expansor se retira en una cirugía posterior y se coloca un implante en el espacio creado por él. Como el músculo pectoral cubre el polo superior del implante, cualquier movimiento del músculo hará que el implante se mueva también. Esto puede ser doloroso e incómodo. Gracias a la invención de las matrices dérmicas acelulares, es decir, láminas de colágeno derivadas de piel animal o humana, ahora podemos colocar un implante en el defecto de la mastectomía durante el procedimiento y fijarlo en su lugar cosiendo la lámina de colágeno alrededor del implante hasta la pared del tórax.
Este nuevo procedimiento impide la expansión dolorosa del tejido, los artefactos de movimiento y el dolor a largo plazo, además de la interferencia con los pasatiempos y regímenes de ejercicios de la paciente, porque deja intactos los músculos de la pared torácica. Las tasas de complicaciones son bajas y las de satisfacción de pacientes son altas.